XXVI
PREGÓN DEL JUEVES LARDERO 2014
“TERTULIA DE CUARESMA PONTANA”, DE SEVILLA
Lo
pronunció
Ernesto Cáceres Molina
Llegó la Cuaresma y el
alma pontana se moviliza. En Puente Genil es el Día de puertas abiertas en que
los Cuarteles se entregan a todo el que quiere indagar en ellos, adentrándose
en su misterio de sacrosanta hermandad. Los pontanos de otros lugares también se movilizan y
vienen desde Madrid, desde Málaga, desde Córdoba. En Madrid, celebran su
tradicional Pregón. En Málaga lo harán el próximo sábado. En Sevilla, la
“Tertulia de Cuaresma Pontana” han organizado hoy día 15, su Pregón de Jueves
Lardero 2014. El nuevo Presidente Manuel
Barahona, recogió el testigo que
dejó el recordado Julio Moreno y ha
organizado un acto importante. Con sus colaboradores, entre ellos Adolfo Reina, contactaron con una Hermandad señera de Sevilla como es
la de San Bernardo, la Hermandad de
los Toreros, sita el barrio del
mismo nombre, que posee una hermosa casa de Hermandad que han puesto a
disposición de la “Tertulia pontana”. Y allí, en su espacioso y luminoso patio
cubierto, se compuso un escenario típicamente local en que un cuadro de Jesús
Nazareno y la figura de la Samaritana, estaban rodeados de los carteles más
emblemáticos de nuestra Semana Santa.
El Presidente, Manuel Barahona agradeció a la
Hermandad de San Bernardo su generosidad al ceder su sede para este evento,
entregando una placa recordatorio a uno de sus directivos allí presente.
Después, presentó a Jesús Asensi Díaz,
pregonero del año anterior, que recibió, también, una placa, y fue el encargado
de presentar al Pregonero, destacando sus facetas de poeta, narrador, letrista
de coplas para la Schola Cantorum, ferviente propagandista de la Semana Santa,
pregonero y hermano de la Corporación “Los Samaritanos” que se desplazaron de
Puente Genil en un autocar, con sus mujeres, y su Presidente José Cornejo Roldán, para acompañar al
Pregonero.
Ernesto Cáceres Molina
nos ofreció un pregón intimista de hondo lirismo, expresado con mucha emoción.
Comenzó enlazando poéticamente Puente Genil con Sevilla:
“De un océano verde y oro de membrillares/
a las copas preñadas de luz del Parque de
María Luisa…”
Hizo una original revisión histórica de la
Cuaresma y del Jueves Lardero y, después,
lanzó un canto al “universo
cohesionador que es la Semana Santa Pontana, un mundo en el que reinan una
solidaridad y un afecto por desgracia infrecuente en otros lugares”. Con
vehemencia expresó que “el pontano adora el lugar en que nació como
Tierra Santa. Y como ser apasionado y amante de lo exquisito, tiene el paladar
educado en el vino y la garganta curtida en la
saeta cuartelera”.
Explicó que la Mananta
es un mundo muy complejo en la que el “cuartel” es uno de los ejes
vertebradores de la misma y se preguntó por qué el hombre de Puente Genil adora
nuestra Cuaresma y la Semana Santa, contestando que “en ellas, y en la forma tan particular en que las celebramos, encuentra lo que busca y eso casi nunca
ocurre en la vida. Encuentra verdad, sinceridad, aliento, reposo, limpieza de
ánimo…”
El recitado de su
poema “El abrazo”, fue muy aplaudido por el sentimiento que puso el Pregonero y
por el contenido del mismo:
“Y un
abrazo en un cuartel
cuando
brindan dos amigos
es sellar ante testigos
un afecto
limpio y fiel”.
Después, continuó
describiendo y piropeando líricamente el cuartel, como “hospital de almas, escuela de nobleza, ejemplo de convivencia,
cenáculo igualador de edades y condiciones, pilar de cofradías, cirio perenne a
los pies de nuestros titulares, cuna de la valiosa saeta cuartelera, arcón de
plata repujada que esconde ropajes y rostrillos centenarios…”
Y otro poema
enternecedor, profundo y tremendamente emotivo, “A la sangre que nos sigue”,
fue el que recitó, musitando, con voz entrecortada e intimista, dedicado a sus hijas:
“Recuerda
tantos años que a mis hombros
entre marchas
esa cima tú alcanzaste,
disfruta el
horizonte que fue mío,
junto al
Cristo, cada Viernes Santo tarde…”
Como Ernesto
Cáceres es, fundamentalmente, poeta, su Pregón fue un
largo poema, en el que se podían entresacar estrofas bellísimas y
enternecedoras como estas:
“Sale “El Amo las Cargas”,
despierta
el alba,
yo me abrazo a mis hijas,
suena la
Diana”
o tremendamente
descriptivas en su sencillez:
“A
ver, segundo turno,
esas
figuras,
que está el Patrón bajo el arco,
todo
dulzura”.
Terminó haciendo una
referencia al día de puertas abiertas en que, en Puente Genil, a esta misma
hora se están abriendo cientos de corazones y se práctica la más hermosa
hermandad:
“¡Paz y
bien, hermanos míos,
ha llegado
la Cuaresma”.
Ernesto Cáceres fue muy aplaudido, abrazado y homenajeado. Su
Pregón sevillano seguro que será
recordado. Sus hermanos de Corporación se encargaron de lograr un clima
cuartelero con sus cánticos y su hermandad, mientras se degustaba la comida y
se bebía el vino traído por ellos, servido en jarras de cerámica con el nombre
de “Los Samaritanos”. Felicitaciones a la Tertulia de Cuaresma Pontana y a su
Presidente Manuel Barahona por este
acto importante de difusión de nuestra Semana Santa.
Jesús Asensi. SEVILLA